domingo, 14 de octubre de 2012

Poemas.

No podré decir que te conozco más que la vida misma y mucho menos que viviré para estar siempre contigo, quizás mucho menos pueda ofrecerte el mundo a tus pies.No te prometeré cosas irreales, ni mucho menos cosas imposibles, solo puedo prometer la sinceridad de mis palabras cuando digo “Te quiero mi niña.” Decir tu nombre como la ultima cosa magnánima antes de morir y que tu recuerdo perpetúe como el más hermoso en mi vida. Quizás lo único que podré entregarte en este tiempo es mi corazón, consagrar mis pensamientos en tu única persona y esperar a que estos viajen en la lejanía, que crucen los ríos y desiertos…. Que lleguen a ti en sus más diversas formas, esperaré a que sobre pasen las alturas, esperaré que escriban en sobre cielo cuanto te quiero. No podré decir que me enamore a primera vista de ti por que quizás sea lo mas estúpido que llegase a decir pero si podré decirte con todo lo que aquello que conlleva que exactamente, sin reparos, sin prejuicios y sin memorias ''la primera vez que te conocí, fue la primera vez que este sentimiento llego a mi''

viernes, 12 de octubre de 2012

En busca de la felicidad.

"No permitas que nadie diga que eres incapaz de hacer algo, ni si quiera yo. Si tienes un sueño, debes conservarlo. Si quieres algo, sal a buscarlo, y punto. ¿Sabes?, la gente que no logra conseguir sus sueños suele decirles a los demás que tampoco cumplirán los suyos".

Y así es.

Veo mucho potencial, pero está desperdiciado. Toda una generación trabajando en gasolineras, sirviendo mesas, o siendo esclavos oficinistas.La publicidad nos hace desear coches y ropas, tenemos empleos que odiamos para comprar mierda que no necesitamos. Somos los hijos malditos de la historia, desarraigados y sin objetivos, no hemos sufrido una gran guerra, ni una depresión. Nuestra guerra es la guerra espiritual, nuestra gran depresión es nuestra vida. Crecimos con la televisión que nos hizo creer que algún día seríamos millonarios, dioses del cine, o estrellas del rock. Pero no lo seremos, y poco a poco lo entendemos, lo que hace que estemos muy cabreados.